¡Hola, creativas!
Hoy, os propongo 10 ideas de regalos originales para niños, que os pueden resultar útiles durante estas fechas. Pero, también, en cualquier otra época del año.
Como vais a ver, a lo largo de esta publicación, en nuestra lista de ideas hay regalos de todo tipo. Desde cosas materiales o que se pueden adquirir en una tienda, hasta otro tipo de regalos que no se pueden comprar, pero que aportan un valor sentimental.
A continuación, os cuento, con detalle, cuáles son estas 10 ideas de regalos originales para niños:
Cartas del “uno” personalizadas.
Que levante la mano quien no haya jugado, alguna vez, al juego de cartas del “uno”. En casa, nos encanta. Por eso, tenemos el juego tradicional, y otro, plastificado, para el verano. Así, nos lo podemos llevar a la piscina o a la playa, y aunque se mojen las cartas no se estropean.
Pues, no os lo vais a creer. Pero, acabo de descubrir otra versión del juego que no conocía y no teníamos en casa. De hecho, creo que puede ser un buen regalo para los niños. Se trata de las cartas del “uno” personalizadas.
Si conocéis la dinámica del juego, sabréis que hay unos comodines, que se utilizan, en momentos puntuales, durante la partida. Pues bien, en esta versión, se pueden personalizar. Es decir, que podemos incorporar a los comodines la foto que queramos.
Me encanta la idea de personalizar el juego de cartas del “uno”. Creo que puede ser un regalo muy original para los niños.
El cuento infantil “El Monstruo de colores”.
Me encanta regalar libros a los adultos y cuentos a los niños. Y es que, en mi caso, leer me ayuda a evadirme de la realidad, a soñar despierta, y a dejar volar la imaginación.
Por eso, cuando le regalo un libro o un cuento a alguien, creo que, en parte, también, estoy regalando todas esas sensaciones juntas.
No exagero. En casa, tenemos tantos libros que podríamos abrir una biblioteca. Y mi hijo Yago, tiene bastantes cuentos infantiles. Podría recomendaros muchos de ellos. De hecho, tengo pensado sacar un recopilatorio, pronto. Pero, si tuviese que escoger uno sólo, entre todos los que tiene mi hijo, sin duda, elegiría “El Monstruo de colores”, de Anna Llenas.
“El Monstruo de colores” es un cuento mágico, con el que viajamos al apasionante mundo de la inteligencia emocional de los niños. Está recomendado a partir de tres años. Tiene un texto sencillo, fácil de entender para los más pequeños de la casa, y visualmente es muy bonito.
Además, “El Monstruo de colores” es una oportunidad de oro para hablar con los niños sobre cómo se sienten. Pueden tener sentimientos de alegría, tristeza, miedo, enfado o calma, a través de un simpático monstruo, que va cambiando de color con cada una de esas sensaciones.
Os animo a que lo tengáis en vuestra biblioteca infantil personal. Y os dejo aquí una reseña de “El monstruo de colores”, que escribí hace ya tiempo, para contaros más detalles sobre este maravilloso cuento.
Cuentos personalizados.
Y hablando de cuentos, creo que los personalizados son un gran regalo, en cualquier época del año. Nosotros, en casa, tenemos uno que nos encanta. Sobre todo a mi hijo. Se lo regalamos a su padre por el “Dia del padre” del año pasado, y fue todo un acierto. Y es que, aparecen los dos (padre e hijo) entre las páginas del libro, como los protagonistas de una preciosa historia.
Sin duda, es un regalo muy original para regalar a cualquier niño. Así que, si estáis pensando en encargar uno, os recomiendo varias cosas a tener en cuenta:
En primer lugar, os aconsejo que escojáis cuentos infantiles personalizados de calidad, porque es importante que el acabado quede bonito, que las fotografías de los protagonistas tengan una buena resolución, y que las ilustraciones sean originales y llamativas.
En segundo lugar, es importante que conozcamos, previamente, los gustos e intereses del niño al que le vamos a regalar el cuento personalizado, ya que él va a ser el protagonista de la historia. De este modo, acertaremos seguro. Por tanto, lo mejor es que escojamos una temática que le guste, o una historia con la que se pueda sentir identificado.
Tiempo para jugar con los niños.
Esta propuesta de regalo, a priori, tal vez, os pueda parecer una tontería. Pero, os aseguro que no lo es. De hecho, creo que regalarles tiempo a los niños, para jugar con ellos, es uno de los mejores regalos, incluidos en esta publicación.
El trabajo, la rutina, las prisas, las tareas diarias o el cansancio nos roban un tiempo precioso. Un tiempo que podríamos invertir en mil cosas, y que, muchas veces, nuestros hijos nos demandan.
A veces, cuando llega el fin de semana, le pregunto a mi hijo Yago: “¿Qué quieres que hagamos esta tarde?”. Su respuesta muchas veces es esta: “Jugar contigo y con papá”.
Si pudierais vernos por un agujerito, os sorprenderíais de la cantidad de horas que jugamos con el peque, tanto su padre como yo, a diario. Sin embargo, para él nunca es suficiente. Y, a mí, personalmente, esto es algo que me encanta. Así que, espero que no se canse nunca de jugar con nosotros.
Por eso, considero que regalarles tiempo para jugar con ellos es uno de los mejores regalos que les podemos hacer, sobre todo cuando son más pequeños. El tiempo pasa muy rápido, y cuando nos queramos dar cuenta, la situación dará un giro radical. Cuando nuestros hijos se hagan mayores, querrán salir con sus amigos. Y, entonces, seremos nosotros, los padres, los que demandemos pasar más tiempo con ellos. 😉
Imanes con fotos.
No sé si os pasa lo mismo que a mí, pero, mi móvil está lleno de fotos a las que no les doy salida. Cada cierto tiempo las paso al ordenador, porque me da pánico perder el móvil y que se pierdan . A veces, llevo a revelar algunas que me gustan. Otras veces, confecciono algún álbum. Pero, muchas fotos se quedan ahí almacenadas, sin más.
Este año, para Navidad, me he propuesto darles salida a muchas de esas fotos, que tengo en el móvil, integrándolas en imanes. De esta forma, las podemos ver a diario. Y, además, me parece un soporte muy original y divertido.
Mi intención es que estos imanes con fotos sean un regalo original para todos, tanto para mi hijo Yago, como para su padre y para mí. Tengo pensado colocar algunos en la nevera, y otros en mi lugar de trabajo, que tiene una zona metálica, en la que se pueden adherir sin problema.
Saco de navidad.
Y hablando de Navidad, de este año no pasa comprar unos sacos, y colocarlos junto al árbol y a la decoración. Siempre lo pienso y, al final, por una cosa o por otra, nunca lo hago. Pero, esta Navidad es diferente y especial. Así que, por fin, me voy a hacer con unos sacos.
Los he visto de muchos tipos: con forma de calcetín, con la inicial de cada nombre, con estampados navideños, sacos de navidad personalizados con foto, etc. Aún, no sé por cual decidirme.
Lo único que tengo claro, de momento, es que voy a comprar tres: uno para el peque, otro para su padre y otro para mí. Después, los voy a llenar con pequeños detalles que nos gusten a cada uno. Creo que van a ser regalos originales y muy especiales.
El arcoíris Waldorf.
El arcoíris Waldorf es uno de nuestros juguetes imprescindibles. Lo tenemos en casa desde que Yago cumplió tres años, y aún le seguimos dando mucho uso.
Esta es la ventaja que tienen los juguetes abiertos, frente a los cerrados. El arcoíris Waldorf nos encanta. En primer lugar, porque es un juguete de madera (me gustan mucho más que los de plástico). Y, en segundo lugar, porque es un juguete abierto. Es decir, que se le pueden dar muchísimos usos a la hora de jugar. Los niños lo pueden transformar en lo que ellos quieran, dando rienda suelta a su creatividad.
En casa, el arcoíris Waldorf ha sido de todo. Mi hijo lo ha transformado en un túnel de coches, en casas para sus muñecos, en montañas donde subía a sus animales, en barcos, en torres, etc. También, con este juguete hemos hecho formas de todo tipo, desde flores hasta un Papá Noel. Además, con él, hemos hecho varios circuitos y juegos inventados. E incluso, nos ha servido como portería para jugar con chapas y tapones.
Así que, os recomiendo este juguete. El arcoíris Waldorf es un regalo muy original para los niños. Y, además, como os he comentado, potencia su creatividad, a la hora de jugar.
El juego de mesa “El frutal”.
“El Frutal” es un juego de mesa cooperativo que nos gusta mucho, en casa.
Hay diferentes versiones del juego. Uno, con piezas más grandes, pensado para los más pequeños. Y otro, con piezas más pequeñas, “el mini frutal”, que, además, nos permite poder llevarlo a cualquier sitio, porque no ocupa nada.
La gran ventaja de este juego es que, al ser cooperativo, no competimos entre nosotros, sino que jugamos en equipo. En este caso concreto, los jugadores tenemos que ir recolectando frutas, antes de que el cuervo se las coma.
Me encantan los juegos cooperativos, porque los niños juegan entre ellos, sin tanta competitividad, sin que lo importante sea ganar o perder. Y, además, con el valor añadido de que adquieren el aprendizaje de trabajar en equipo, de ayudarnos los unos a los otros.
Por eso, os recomiendo el juego de mesa “El frutal”. Es un buen regalo para los niños. Y, en general, os animo a que optéis por juegos cooperativos.
Un regalo hecho por nosotros.
A veces, algo hecho por nosotros, tipo manualidad o similar, puede convertirse en el mejor de los regalos para nuestros peques. Doy fe de ello. 😉
Hace poco, he elaborado un parque infantil casero en miniatura, que ha sido todo un acierto.
A mi hijo Yago le encanta. Ahora, juega casi todas las tardes con el parque infantil casero. Coloca a sus muñecos en los columpios o en el tobogán, e incluso, los sienta a jugar en la zona de la arena.
Además, este tipo de regalos, hechos por nosotros, tiene la ventaja de que tenemos total libertad para desarrollar nuestra creatividad, ya que el abanico de posibilidades es inmenso.
Juegos tradicionales.
Por último, pero no por ello menos importante, os propongo regalar a vuestros peques juegos tradicionales clásicos, como la peonza, el yoyó, las chapas, la rayuela o la comba, entre otros muchos. O, incluso, reinventados o inspirados en éstos, como es el caso de las “Bey Blade”. Estas últimas son como las peonzas tradicionales, pero mucho más modernas, y con un tirador incluido que las hace girar mucho más rápido.
A veces, los juegos de siempre son todo un acierto, a la hora de hacer un regalo a los niños. Y es que, no pasan de moda, y, además, como nos suelen recordar a nuestra infancia, nos solemos involucrar mucho más, dando pie a que juguemos todos juntos, en familia.
Y hasta aquí… la publicación de hoy. Espero que os hayan gustado nuestras 10 ideas de regalos originales para niños. Y, además, aprovecho para animaros a jugar mucho con vuestros hijos.
Gracias por estar ahí.
¡Nos leemos pronto! 😉